Escrito: La historia de Kris
16:51
Hola a todos! ¿Como les va este fin de semana tan bonito? Los del hemisferio norte ya terminaron las clases debo decirles que les tengo una envidia muy grande. Igual en Argentina tenemos un feriado largo de 5 días que lo vamos a disfrutar :) . Miren lo que les traigo.. deben gritar diciendo ALELUYA porque les traje uno de mis escritos.
Este escrito es lo que estoy escribiendo ahora... habla de un chico llamado Kris que estuvo durante dos años en lo que llaman el bosque prohibido y no recuerda nada de su pasado. En realidad lo estoy construyendo de a poquito. Espero que les guste y si quieren opinar háganlo estoy abierta a todo.
La bestia
se nos planteó delante de nosotros. Su pelaje gris estaba cubierto de musgo, lo
que lo hacía espantoso. Su baba verde caía en la piedra. Parecía interminable
el camino, y más si teníamos una bestia delante de nosotros. ¿La derrotaríamos?
-
Keyla- la llame por la mente.
Ella me
miro y asiento.
Sabía lo
que teníamos que hacer. Éramos guerreros: fuertes y sin rendición.
Sus manos
se volvieron verdes mientras cerraba los ojos y pronunciaba un hechizo. Yo
sujete la espada de mi cinturón y la saque: esta se estremeció y el diamante
azul brillo como un millón de estrellas. Corrí como si no hubiera un mañana, el
dolor de mi pierna se volvía mayor y me ordenaba que me quedara quieto y
corriera por mi vida.
Pero éramos
guerreros… Nosotros. Jamás. Bajamos. La. Mirada.
Keyla lanzo
la luz verde a la bestia, pero esta no se detuvo. Se abalanzo hacia nosotros
pero ella salto y pudo escapar de la bestia morbosa. Yo trate de ir por detrás para
clavarle mi espada, pero la bestia se dio cuenta y me golpeo con su garra.
Me choque
contra la pared y el dolor era interminable. Mi pierna palpitaba del dolor y yo
mediante una mueca esparcía mi dolor. Keyla
saco su daga de su zapato y trato de clavarle a la criatura en los ojos,
mientras la otra mano se encendia de verde.
Me levante
desafiando al dolor y mis ansias de quedarme esperando y esconderme.
En el
bosque prohibido había sobrevivido al rey de las bestias y esto solo era una
molestia. Me levante cerrando mis ojos, alcé la espada y con mis ojos aun
cerrados corrí.
Sentí el
frio en mi espalda, en mi piel y los abrí. Estaba en las alturas a unos metros
de donde me había encontrado. Keyla seguía combatiendo. Podía ver el sudor cayendo
de su frente. “Lemenus echentad locrumos” se oía decir, unos rayos salían de
sus dedos. Pero la bestia era invencible y ningún hechizo que mi amiga lanzaba
lo derrotaba.
En un
momento vi su punto ciego.
A unos
metros de la bestia. Corrí y corrí hasta caer desde las alturas. El viento me cubría
la sangre y hacia que mi herida ardiera. De cabeza todo se volvía y la mirada
de Keyla se fundió con la mía, sus ojos violetas eran ahora azules por el poder
de su interior. Pero rompí la conexión y me concentre en mi ataque.
La bestia
veía. Sus ojos de oro. Sus ojos eran su punto.
Cuando caí
sobre la bestia levante mi espada y se la clave en uno de los ojos. Mire hacia
Keyla mientras la bestia se retorcía sobre mí. La joven supo que hacer, corrió
hacia ella y agarro su daga y se la clavó en el otro ojo.
Al bajar
ella se puso entre los ojos de la bestia y conjuro un hechizo. La bestia aunque
trataba de seguir adelante, la muerte le gano y cayó a nuestros pies.
Al dar un
suspiro de gloria mis pies cayeron del dolor. Mi cabeza se golpeó contra el
suelo de piedra y yo volvía a la oscuridad.
¿Les gusto?
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1 Comentarios
Me gustooo mucho!
ResponderEliminarHola Persona o Unicornio que pase por aquí.
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